• Tambores que sanan mujeres
Entre otras cosas el genocidio de Ruanda también alteró las jerarquías sociales imperantes. Ingoma 
Nshya, el primer grupo de mujeres tamborileras del país es un ejemplo de ello.
 Antes de las masacres, los tambores sólo podían ser tocados por algunos hombres 
cuidadosamente seleccionados. Actualmente las mujeres tamborileras de Ingoma
son reconocidas internacionalmente y han realizado giras por África, Europa 
y Estados Unidos.
A la vez que un modo de dar recursos a las mujeres
 participantes, esta idea de Odile Katese desarrollada en la
 Universidad de Butare, también ha sido (y es) una forma de terapia colectiva que, a 
través de la creación y del arte, ha ayudado a la sanación de este grupo de mujeres.
 
Vídeo perteneciente al Especial despuesdelapaz.periodismohumano.com.